La Diócesis de San Diego en E.U. que llegó a un acuerdo económico con víctimas de abuso sexual y ahora tiene que desembolsar doscientos millones de dólares, fracasó en su estrategia de declararse en quiebra. Hay que mencionar que esta Diócesis atiende al menos a un millón de personas, posee colegios, bienes inmuebles y anualmente entre limosnas y donaciones capta aproximadamente 165 millones de dólares. Pues ahora ha convocado a sus fieles a cooperar para sacar adelante ese compromiso. Ya sabemos que la religión es un excelente negocio pero lo más conveniente sería que los curas pederastas fueran llevados a juicio y en su caso fueran encarcelados como castigo a sus miserables crímenes.
¡¿QUÉ?! ¡¿QUÉ?! ¡¿QUÉ?! ¡¿QUÉ?!
ResponderBorrarO sea que ¿los "fieles" devotos son los que van a pagar por los crímenes de los sacerdotes? Bueno, merecido se lo tendrán por crédulos ¡es el colmo!
Lo peor, es que seguramente habrá mucho incauto que cooperará por miedo a irse al infierno... en fin.